
¿Qué es un champú natural ?
Como su nombre indica, un champú natural está elaborado con ingredientes que no provienen de la industria química. Su composición minimalista respeta la salud del cabello. Está inspirado en la cosmética artesanal que elaboraban nuestras abuelas antes de la llegada de los champús industriales.
Es un champú que contiene sólo unos pocos ingredientes de origen natural con un poder limpiador y desenredante ya conocido desde hace tiempo.
Para que el champú limpie el cabello correctamente, primero necesita un tensioactivo suave. Este es el que ayuda a eliminar la suciedad del cuero cabelludo. El cocoil glutamato sódico, un tensioactivo elaborado simplemente con ácidos grasos de coco, es el que se utiliza en los champús Comme Avant.
A continuación, encontramos un aceite vegetal, en este caso aceite de avellana. Nutre el cabello, aporta brillo y suaviza el cuero cabelludo. La arcilla ayuda a limpiar el cuero cabelludo y a absorber el exceso de sebo.
Finalmente, para facilitar la conservación y el uso del producto, se añade un acondicionador: alcohol behenílico. Se trata simplemente de un alcohol graso derivado de la colza. Es completamente natural e inocuo. Todos estos ingredientes cuentan con certificación orgánica para garantizar un producto cosmético respetuoso con la salud.
Champú natural y champú industrial, ¿cuáles son las diferencias?
Aunque los champús industriales intentan aprovechar la tendencia del marketing ecológico, existe una gran diferencia entre ellos y los champús naturales. La más evidente es la longitud de la lista de ingredientes. Es raro que un champú químico tenga menos de 10 ingredientes.
Además, estos son ingredientes que no se encuentran al preparar champú casero: parabenos, siliconas, sulfatos, surfactantes químicos y fragancias sintéticas. Algunos de estos productos, como los sulfatos y los parabenos, se mencionan regularmente en diversos estudios que demuestran sus efectos nocivos.
Quizás no lo sepas, pero muchos de los ingredientes de los champús químicos se desarrollaron originalmente para la limpieza industrial. Por ello, tienden a resecar el cuero cabelludo.
Si bien la silicona puede ayudar a mantener el cabello brillante y bien nutrido a corto plazo, lo asfixia y daña la fibra capilar. Dado que los efectos artificiales de estos productos desaparecen rápidamente, es necesario lavarlos con más frecuencia.
La diferencia entre un champú natural y uno comercial también radica en el impacto ecológico. El método de producción de cosméticos petroquímicos es devastador para la naturaleza. Además, al enjuagarse el cabello, los productos regresan al ciclo del agua y lo contaminan.
Los champús convencionales se envasan en botellas de plástico que se convierten en residuos y son difíciles de reciclar tras su uso. Un champú orgánico puede venderse como champú seco con un envase minimalista.
¿Por qué cambiar al champú natural ?
Hay muchas razones para cambiar los champús tradicionales por los naturales. La primera es el deseo de cuidar el cabello. Con los champús naturales, el cuero cabelludo se respeta gracias a su pH 5, perfectamente adaptado.
Utilizando ingredientes naturales limpia suavemente y nutre tu cabello durante mucho tiempo, dejándolo hermoso, brillante y sedoso por más tiempo.
La segunda razón para preferir los champús naturales es el deseo de cuidar el planeta.
Al elegir champú sólido orgánico, reduces el uso de productos químicos y la producción de envases de plástico. Además, evitas contaminar el ciclo del agua, lo cual es positivo, ya que este recurso es preciado.
Los champús naturales también son una excelente manera de aliviar tu carga financiera. Una sola pastilla de champú seco de 70 g te permite lavarte el cabello tantas veces como dos botellas de 200 ml de champú tradicional.
Además, como los efectos duran más tiempo, te lavas el cabello con menos frecuencia.
¿Quién puede utilizar el champú tradicional?
Quizás te preguntes si el champú orgánico es un producto de belleza adecuado para tus necesidades. De hecho, algunos productos orgánicos no se recomiendan para niños ni mujeres embarazadas, sobre todo por su contenido en aceites esenciales.
Lo mejor de un champú natural como esta pastilla de champú seco orgánico con aceite de avellana es que es apto para toda la familia. Libre de aceites esenciales, tampoco contiene ingredientes controvertidos ni potencialmente dañinos. Por lo tanto, puede ser usado por toda la familia, sin importar la edad. Produce tanta espuma como un champú tradicional, pero cuida mucho mejor el cabello. Es ideal para niños y bebés con piel especialmente frágil.
¿Tienes el cabello graso? No hay problema, un champú natural te ayudará a limpiarlo y a prolongar el tiempo entre lavados. ¿Tu cabello es fino y quebradizo? El aceite lo nutrirá y fortalecerá, mientras que los tensioactivos suaves lo limpiarán con suavidad.
Este tipo de champú también es apto para cabello teñido. Ayuda a que el color de tu cabello conserve su hermoso brillo. ¡Pruébalo y pronto serás indispensable en tu rutina de belleza!
Usar un champú sólido orgánico, elaborado con ingredientes sencillos inspirados en las recetas de nuestras abuelas, es una rutina de belleza sencilla que toda la familia puede adoptar. Protegerás tu cabello y el planeta de los efectos nocivos de los champús industriales.
Los productos de belleza sólidos reducen el embalaje y son respetuosos con el medio ambiente, contribuyendo al ciclo del agua. Sin importar tu edad o tipo de cabello, puedes cambiarte a champús sólidos con confianza. ¡Tu cabello, el planeta y tu bolsillo te lo agradecerán!