Los pasos para hacer jabón de arcilla
A la hora de elaborar jabones orgánicos, el uso de arcilla es ideal para dar color de forma natural a los jabones a la vez que aporta propiedades beneficiosas para la piel.
Te explicaremos detalladamente el proceso de elaboración del jabón de arcilla.
¿Cuál es la receta para hacer jabón clásico?
El jabón es una receta elaborada con una mezcla de aceites vegetales y sosa cáustica. Algunas marcas optan por añadir fragancias u otros aditivos naturales como mantecas. El proceso en frío combina estos ingredientes para crear una barra sólida rica en glicerina. Esta base de jabón sólida se obtiene al añadir aceites vegetales a la sosa cáustica y al agua.

En cuanto a los elementos opcionales, será posible añadir aceites esenciales para el aroma, arcilla para la textura, las virtudes y posiblemente el color, o incluso ingredientes exfoliantes naturales (posos de café por ejemplo), plantas secas (lavanda, pétalos de rosa)...
¿Qué es la arcilla?
La arcilla es un material mineral que se produce por la erosión de las rocas, en particular de las rocas silicatadas como el granito. Este material se seca, se muele y finalmente se procesa para extraer las impurezas.
Las arcillas son ricas en sales minerales, hierro, zinc, silicio, magnesio, potasio, calcio y oligoelementos. Por ello, se utilizan en productos cosméticos. Es especialmente popular en la elaboración de jabón, ya que es especialmente adecuada para pieles con tendencia a las imperfecciones.
Existen diferentes colores de arcilla: cada color tiene su origen en su composición de óxidos de hierro.

Los diferentes colores y calidades de la arcilla.
- Arcilla verde . La arcilla verde es ideal para tratar la piel grasa. Tiene la capacidad de absorber el exceso de sebo y controlar su producción. Sin embargo, debe usarse con moderación, ya que el exceso puede resecar la piel. La elegimos para nuestro jabón para piel con imperfecciones .
- Arcilla rosa . Posee propiedades nutritivas y suavizantes. Es especialmente eficaz contra las irritaciones y ayuda a restaurar la salud de la piel.
- Arcilla amarilla . La arcilla amarilla tiene propiedades limpiadoras, purificantes, absorbentes y reguladoras, al igual que la arcilla verde.
- Arcilla marrón . El ghassoul es una arcilla saponífera, que significa limpiador y se encuentra únicamente en Marruecos. La palabra ghassoul proviene del árabe "ghassala", que significa "lavar". El ghassoul es perfecto para personas con piel y cuero cabelludo sensibles.
- Arcilla blanca . La arcilla blanca, o caolín, es una arcilla con propiedades fortalecedoras, ideal para personas con piel seca y sensible. Incluso se puede usar en pastas dentales caseras, especialmente por sus propiedades remineralizantes y su suave poder abrasivo.
- Arcilla roja . Esta arcilla adquiere su color gracias a su riqueza en hierro y oligoelementos. Sus propiedades se utilizan en pieles apagadas, secas e incluso atópicas. La elegimos para nuestro jabón, diseñado para pieles maduras y deshidratadas.
- Arcilla azul . Es una arcilla bastante rara y poco conocida. Debe su color a su contenido de sílice y pigmentos naturales. Además, ayuda a eliminar las impurezas del rostro, a la vez que lo calma.
- Arcilla gris. También llamada bentonita. Esta arcilla es conocida por sus propiedades absorbentes. De hecho, puede absorber hasta diez veces su peso en agua. Es ideal para personas con piel grasa.
Cada arcilla tiene características diferentes, cada una con diferentes virtudes.
¿Cuál es la receta de un jabón a base de arcilla?
Existen diferentes métodos para hacer jabón.
En Comme Avant, elaboramos todos nuestros jabones de aceite de oliva mediante saponificación en frío. Añadimos la arcilla después de mezclar el aceite de oliva con la sosa cáustica y antes de añadir un aceite vegetal adicional (aceite de laurel para la versión de arcilla verde y aceite de borraja para la versión de arcilla roja).
También es posible fabricar tu propio jabón mediante saponificación en caliente.
Por último, en el método DIY, puedes partir de una base de jabón existente siguiendo el proceso que se explica a continuación para rehacer el jabón.
El método de refabricación de jabón, también llamado rebatching o método de jabón molido, consiste en trocear el jabón usado, fundirlo y añadir los ingredientes deseados. Este método se utiliza para reciclar jabones al final de su vida útil.