Este año la Navidad será en modo lento
Hace unos días montamos y decoramos nuestro bonito árbol de madera con Nael, ¡que podremos reutilizar durante varios años!
Este año queremos vivir una Navidad en modo “slow” (o “lenta” para los angloparlantes), una Navidad sin desperdicio y lo más alejada posible del sobreconsumo. En nuestra familia el objetivo está dado y esperamos que se respete lo mejor posible.
Por supuesto, cuando se trata de niños, ahí es donde será más difícil. Será complicado evitar por completo los juguetes de plástico “Made in China” o el exceso de embalaje que acabará en la basura en cuanto se abra.
Pero si ya intentamos reducir la lista de la compra para evitar la profusión de regalos con los que no quieren jugar, podemos hacer nuestra parte. Y por supuesto también intentando privilegiar la calidad sobre la cantidad, y el origen francés (hay marcas de juguetes francesas muy bonitas).
En cuanto a los mayores, nuestra prioridad este año será favorecer la artesanía francesa y los regalos intangibles (una entrada para un concierto, por ejemplo, o un restaurante con estrella) y los regalos personalizados que hagamos nosotros mismos con nuestros recuerdos. Bueno no diré más, aún guardaremos sorpresas para nuestra familia que nos lee pero ya os haréis una idea.
El papel de regalo desechable está prohibido, dará paso a Furoshiki o Azuma Bukuro (los japoneses son muy inventivos), a bolsos o incluso a bufandas viejas. ¡La idea es utilizar telas para sustituir el papel de regalo y limitar el desperdicio!
La magia de la Navidad es algo cercano a nuestros corazones. Las vacaciones son sobre todo una oportunidad para pasar tiempo juntos, para ver a los niños asombrados, para encontrarse con familias que no vemos a menudo y también para comer bien.
Disfruta de la Navidad, comparte, dale me gusta y sigue nuestras convicciones para redescubrir este simple momento. Un placer que no debería rimar con tomarse un descanso de 48 horas en nuestra transición ecológica .
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