Hoy el trabajo esperará.
Son más de las cinco de la tarde.
Normalmente trabajo duro para terminar tantas cosas como sea posible antes del fin de semana. Me pregunto cómo las horas pueden pasar tan rápido logrando tan poco. El estrés y la ansiedad me están afectando, debería y podría haberlo hecho mejor. A pesar de la experiencia y de los años que se acumulan, sigue siendo una fase que domino muy mal: dar un paso atrás y mirar el trabajo realizado sintiendo satisfacción.
Durante más de 2 años, hemos trabajado duro para construir una empresa que aúne nuestros valores y nuestras convicciones ofreciendo productos éticos y de calidad .
Hoy, curiosamente, no tengo ese sentimiento. Puse una pequeña nota “ cierre excepcional ” en la tienda de Marsella, agregué un correo electrónico de ausencia automática y un mensaje en la página de contacto del sitio. Hoy no trabajamos y la empresa estaba cerrada.
Es una extraña paradoja, mientras no hemos estado trabajando y yo no he sido productivo, me siento confiado y tranquilo. Este día ha dado un nuevo aire a un equipo ya bien formado, sólido y serio.
Los últimos meses han sido complicados para todo el equipo independientemente del departamento y no hizo falta mucho para permitir que todos se tomaran un respiro. Un día sencillo y natural . Algunas actividades juntos, una decena de mesas y sillas para comer una pizza con toda amistad. A veces esto es suficiente para recargar las baterías. No hubo expectativas particulares, ejercicios de team building como “team building” y menos aún retorno de la inversión a partir de este día. Estábamos muy lejos de las cifras de producción y ventas. Por una vez, simplemente disfrutamos el momento presente. Una disminución que sienta bien y lo vi en las miradas.
Esto es a veces lo que falta en mi vida personal y profesional. Simplemente levanta la cabeza, respira y vive. El trabajo esperará.
Nilo
